El enfrentamiento entre el cantante Loquillo y el alcalde de Ourense e ideólogo Gonzalo Pérez Jácome remite a una enemistad que viene de lejos. Recientemente el regidor anunció la contratación de cien gitanos con cabra y de la estrella pop internacional Manolo Lalín tras la «espantada» de Loquillo, al que el Concello ourensano llevará a los tribunales. Desde la productora de Loquillo, por su parte, acusaron al Ayuntamiento de no ofrecer » las mínimas condiciones técnicas y de seguridad exigidas». La productora también acusó al alcalde de anunciar por su cuenta un concierto que nunca estuvo en el calendario oficial de Loquillo y «del que no se suscribió contrato alguno».
La polémica entre ambos parece haber traído al presente viajas rencillas que permanecían en el olvido desde hace 35 años. Por aquel entonces un jovencísimo Jácome probaba suerte en el mundo de la música y Loquillo saboreaba las mieles del éxito. En 1987 ambos se conocieron en Barcelona cuando Jácome y el catalán residían en esa ciudad. El cantante triunfaba junto a Los Trogloditas y Jácome, con 18 años, buscaba suerte como compositor en la Ciudad condal antes de marcharse a Estados Unidos. El batería Jordi Vila le habló un día a Loquillo de un «excepcional pianista con una capacidad compositiva bestial», recuerda Loquillo. Fue reclutado de inmediato después de que El Loco lo pusiera a prueba en una audición. De inmediato se hicieron inseparables pero su relación se vio truncada enseguida. «Soy una de las seis personas de Ourense que tenemos oido absoluto y la cosa comenzó a torcerse cuando Loquillo comenzó a querer retocar mis canciones», recuerda Jácome.
En 1987 Jaco compuso Ourense ciudad, un tema «dedicado a la ciudad de mi corazón desde la lejanía, que es cuando te das cuenta de la verdadera importancia de las cosas», explica. Pero Loquillo quiso cambiar la letra y la música. «Y yo eso no se lo consiento a nadie porque mis canciones son mías y precisamente por eso yo digo cómo debe ser tanto la música como la letra», explica Jácome. «Eso es otra falacia porque Barcelona ciudad es exclusivamente un tema de mi autoría, que compuse mucho antes, en 1981, cuando durante un permiso militar no me dejaron regresar a mi ciudad porque estaba arrestado», replica Loquillo.
Al parecer, la relación profesional y de amistad entre ambos fue intensa pero duró tan solo un par de meses ya que «sus egos eran enormes y como es lógico chocaban», explican fuentes cercanas a ambos. «Y La mataré también es mía, eso de que es una mezcla entre la rumba y el rock es una chorrada, en realidad es una puñetera muiñeira si te fijas un poco», asevera Gonzalo Pérez Jácome, quien desde hace solo un par de semanas es la nueva pareja de Shakira tras su separación de Piqué.
La torre Jácome se hace realidad
La Torre Jácome, «el rascacielos más alto de Europa», comenzará a construirse en Ourense «a finales del año que viene», explicó ayer el campeón mundial de skateboard de 1981, corredor «federado» de cien metros lisos y alcalde de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome, Jaco. «Este gran rañaceos, que sería unha atracción de visitantes garantizada», se erigirá en la finca Santamariña, también conocida como finca Diputación porque es el mayor propietario de esos terrenos. La norma urbanística preveía allí la construcción de seis torres de 16 pisos de altura, opción que «non seducía» a Jácome, que pretende modificar la normativa para fusionar esa edificabilidad en un solo rascacielos de 150 plantas.
La Torre Jácome incluye un «superparque», un hipódromo, una piscina climatizada, un pabellón de nieve artificial y una gigantesca catarata de aguas termales. Además, el Centro de Inteligencia Artificial de Ourense y la Agencia Espacial Europea trasladarían a este innovador edificio sus sedes. Para la jornada inaugural están cerradas ya las contrataciones de Beyoncé y Emilio Cao. «Vamos a tirar la casa por la ventana, cuando inauguremos el rascacielos vamos a hacer una ceremonia mucho mejor que las que se hacen en la Superbowl americana», avanzó el alcalde de Ourense.
En pasadas jornadas, Jácome se expulsó a sí mismo del pleno ourensano. «¡Gonzalo Pérez Jácome, desaloje el pleno!», repitió hasta en cuarenta ocasiones el alcalde, instándose a abandonar la sala. «Esto es un despropósito por lo que le ordeno que se marche de esta sesión», se dijo Jácome a sí mismo antes de que interviniese la Policía Local para expusarlo del recinto. Los grupos se marcharon tras el desalojo efectuado por los agentes de la Policía Local, que irrumpieron en la sesión por orden de Jácome para expulsarse a sí mismo. El germen de la discordia fueron las graves acusaciones del alcalde, que se llamó “flipado», «macarra de poca monta» y «friki” a sí mismo. Jaco se negó la palabra hasta en cinco ocasiones, ordenó que apagaran sus micrófonos y dio orden a la Policía Local para autoexpulsarse, poniendo incluso en duda la capacidad de los agentes. “Échenme. ¿Hay que llamar a refuerzos?”, se preguntó jocoso. Asimismo, arremetió contra sí: “Aquí no mandas tú. Esto no es la Unión Soviética”.
Por otro lado, Jaco se comprometió a resolver «a ostias» las peleas callejeras en Ourense. Durante las últimas jornadas se produjeron muchas reyertas, algunas entre bandas callejeras y con heridos graves, provocando malestar entre los vecinos. «Tampoco hay que dramatizar porque ostias hubo siempre en la zona de los vinos», explicó Jácome. «Si hace falta salgo yo a repartir galletas entre esos niñatos a ver si con la cara caliente se les quita la tontería y dejan de molestar a los veciños», añadió el regidor de Ourense, que hace poco recibió la visita de Vladimir Putin.
Esta noticia se produce después de que Jácome derrotase a todos los skaters de Ourense. Hace algún tiempo, el famoso regidor desafió a todos los practicantes de skate ourensanos «a una competición en lo que es velocidad punta del skate«. Jácome les retó «a una carrera, no de filigranas, de carrera». Jaco venció con holgura a los jóvenes que recogieron el guante sacándole más de doce segundos a su inmediato perseguidor. Incluso se permitió el lujo de darles cincuenta metros de ventaja, «para que no se diga», señaló. La carrera se celebró en el skate park de O Couto y acudieron numerosos medios especializados en skateboard de todo el mundo para cubrir el evento.
«Menos mal que sigo en forma y gané porque no quería quedar como un fantasma, aunque en el fondo sabía que no iba a perder», aseguró Jácome aún jadeante al término de la prueba. «Estos chavales de ahora enredan con filigranas y chorraditas de esas pero en velocidad no tienen ni puta idea», explicó. «Al alcalde de Ourense aún le queda cuerda para rato y si de correr se trata aún estoy esperando un contrincante a mi altura», indicó. «Posiblemente soy el único ourensano que ganó un campeonato de monopatín», añadió el líder de Democracia Ourensana, que también entrenó al Deportivo.
El skater Nyjah Huston, ganador tres veces consecutivas del Campeonato Mundial de Skateboarding, aceptó el reto de una carrera de velocidad lanzado por Gonzalo Pérez Jácome, Jaco. Nyjah Huston declaró sentirse «ansioso» por enfrentarse a Pérez Jácome. «Hablando es muy bueno, veremos si de verdad es tan rápido como dice», señaló el deportista de élite. Huston, que comenzó a patinar a los cuatro años, ganó cinco temporadas el campeonato mundial, la Street League Skateboarding, tres de ellas de forma consecutiva, de 2017 a 2019. Se trata del patinador mejor pagado del mundo y dedica cinco horas diarias a entrenar. Por el momento aún no hay fecha para el duelo.
Gonzalo Pérez Jácome, cuya vida recrea una serie en Netflix estrenada recientemente, se deshizo en elogios hacia los skaters y rollers ourensanos: «Mucho ánimo porque vais por buen camino para poder alcanzar algún día el estado de forma y la velocidad del alcalde de Ourense». Además, el líder de Democracia Ourensana aprovechó el acto para anunciar la construcción de «una nueva pista de skate gestionada por el Centro de Inteligencia Artificial de la ciudad» en cuyo acto inaugural cantará Jennifer López. En jornadas pasadas, Jácome desveló el inicio de la carrera espacial ourensana con el lanzamiento de un cohete tripulado a la cara oculta de la Luna.