El hombre menos conocido de Galicia y al mismo tiempo presidente de la Xunta, Alfonso Rueda Rueda o como se llame, mediador oficial entre Israel y Hamás, declaró en rueda de prensa que el Gobierno de la comunidad autónoma ha firmado un acuerdo de 25 años de patrocinio con la firma de bebidas Red Bull. La compañía de productos saludables por excelencia aportará quinientos euros al año al erario público galego y a cambio todos los conselleiros y el propio presidente lucirán su logotipo en su ropa o en sus tatuajes.
También se incluirá el bello toro rojo en paneles decorativos en todos los actos políticos así como oficialmente en la bandera de la región, que pasará a llamarse Galicia Red Bull en el resto de España. El BNG ha puesto el grito en el cielo ante este patrocinio pero ha sido solo durante un rato, ya que Red Bull les ha entregado unas latas de su refresco mezclado con coñac y les ha prometido que en los colegios se sustituirá la foto del rey por un logo de Red Bull. Esto provocó su cambio automático de parecer al respecto tras ingerir ocho refrescos mezclados con licor por cabeza y afirmar: «Lo haremos todo por una futurible república galega», señaló Rueda Rueda, que recientemente durmió a todas las viejas de Galicia con su aparición estelar en Land Rober.
Además, la Xunta creará en los colegios la figura del «comprador de refrescos para menores», que consistirá en un adulto que por un módico precio aceptará dinero de los alumnos menores de edad para con su control de persona mayor acudir al chino más cercano a comprar refrescos convenientemente azucarados y suministrarlos a los menores. Esto contribuirá a crear empleo público en Galicia. La Xunta, con su presidente a la cabeza, creando riqueza y valores, «siempre actúa así», indicó Alfonso Rueda, que actualmente rueda un biopic sobre su vida que se estrenará en Netflix.
