Es la moda y nadie se libra. El alcalde y líder infinito de Oleiros no iba a ser menos, también ha sido amenazado. Durante la mañana del pasado martes, en la que Seoane se encontraba en los terrenos del futuro campo de golf Antonio David Flores dedicado a pensar en obras sociales y altruistas mientras se tomaba unos viños, llegó a su casa un paquete sospechoso.
Sus allegados vieron raros caracteres orientales sospechosos en la etiqueta del paquete y procedieron a abrirlo. El contenido les dejó estupefactos. Era todo ropa interior usada sin lavar, que desprendía un olor nauseabundo a fluidos corporales: tangas, bragas, bikinis, microtangas y microminitangas de hilo dental, estos últimos impregnados por restos de heces. Dentro de la caja además había otra más pequeña envuelta en celofán con un lazo, en de la que hallaron dos tampones manchados de sangre reseca.
Cuando Gelo volvió a casa se mostró muy sorprendido y afectado por el paquete amenazador. Su nombre venía claramente escrito en la dirección, estaba dirigido a él, sin duda para hacerle daño, porque él mismo tradujo los caracteres orientales del resto del embalaje, japonés en concreto, que rezaban faltas de respeto y amenazas hacia su persona. Acto seguido, procedió, entre lágrimas, a destruir el contenido, para que no hiciera daño a nadie, dijo, quemándolo en la chimenea de su palacete. La violencia política ha llegado incluso al pacífico municipio de Oleiros, reflejo de su importancia en el mundo.
