El escritor peruano Mario Vargas Llosa, que censuró la independencia de Cataluña en una marcha organizada por la extrema derecha, defendió ayer «la unidad de Panamá al igual que la unidad sacrosanta de España». El Premio Nobel de Literatura, que cuenta con las nacionalidades peruana y española, apareció en los papeles de Panamá como propietario de una sociedad offshore en las Islas Vírgenes británicas. En este sentido, Vargas Llosa afirmó que «la culpa de todo la tiene el nacionalismo», sin aclarar si se trata del español o de otro.
Tras su romántico idilio con Isabel Preysler, Vargas Llosa es un habitual en las revistas del corazón y un fan confeso de Julio Iglesias. Tanto se pone a despotricar de Gabriel García Márquez como arremete contra el castrismo o lo alaba… según quién le pregunte. Aún así imparte clases magistrales de política para la clase obrera mientras cena en exclusivos restaurantes a los que llega en coches de alta gama. Suele defender la independencia del pueblo palestino mientras critica la de Cataluña. También es habitual que de lecciones de moral mientras viaja en yates de lujo acompañado por sus amigos multimillonarios. Y llama a Donald Trump «payaso» mientras asegura que Mariano Rajoy «es un genio renacentista». Un ejemplo a seguir.