El jugador del Real Madrid Sergio Ramos presentó ayer en Alicante su ensayo filosófico-teatral Realidad tautológica en el jardín kármico, su ópera prima, que el autor definió como «una obra sobre la insoportable levedad del ser», en referencia a la famosa obra de Milan Kundera. En ella, el intelectual andaluz aborda los grandes interrogantes que siempre han inquietado al ser humano: quiénes somos, de dónde venimos, dónde vamos y qué demonios lleva Piqué en el pelo.
El también capitán de la Selección española de fútbol definió su obra como una suma entre la necesidad del eterno retorno nietzscheano y la vinculación estructural entre lenguaje y mundo de Wittgenstein. «La realidad aprehendida, el positivismo ominoso y ese existencialismo de salón practicado por ciertos discípulos de la Escuela de Nüremberg me parecen del todo recalcitrantes y por eso he escrito este libro», concluyó el dorsal cuatro del equipo merengue.