Fuentes del Partido Popular (PP) y Vox exigieron al Gobierno la reapertura «de inmediato» de los puticlubs. Los lupanares fueron cerrados ayer por decreto gubernamental ante la amenaza del coronavirus. «Es una vergüenza que priven a los ciudadanos de bien de un servicio tan español y tan castizo como son las casas de putas, que deben de permanecer abiertas permanentemente ante el gran servicio social que prestan», esgrimieron desde el PP. «Lo próximo será que prohiban tener chacha o salir a matar jabalíes», señalaron desde Vox. Según la formación de ultraderecha, «las putas forman parte del acervo cultural español desde tiempos inmemoriales y prohibirlas supone atentar contra la esencia de la hispanidad».
El Gobierno ordenó el cierre de todos los puticlubs de España tras la cuarentena decretada para frenar el coronavirus. Los prostíbulos quedaron clausurados y sólamente pueden prestar servicios mínimos en casos de emergencia como despedidas de soltero, scorts a domicilio o atención a vírgenes, tal y como recoge el Boletín Oficial del Estado.
Todo el país quedó formalmente cerrado con la aprobación del decreto del estado de alarma. Un gigantesco aislamiento en sus casas de más de 47 millones de personas, que solo podrán salir a la calle en soledad, según el presidente, Pedro Sánchez, para trabajar y comprar comida, medicamentos, artículos básicos o ir al prostíbulo. El Gobierno evita así paralizar completamente la producción, que se mantendrá activa según el decreto. Los ciudadanos podrán desplazarse entre ciudades en coche o en avión para trabajar.