La madre de Luis Rubiales, Angeles Béjar, enseñó los pechos en el campanario de la parroquia de la Divina Pastora de Motril, donde permanecía encerrada desde el pasado lunes. Su intención, explicó, era «reiterar la idea de que el polémico beso de su hijo a Jenni Hermoso fue consentido». Tras realizar esta performance fue ingresada en el hospital Santa Ana de Motril al no encontrarse bien en el que era su tercer día de huelga de hambre. Así lo ha confirmado el párroco de la parroquia de la Divina Pastora, situada en el centro de la ciudad, a los medios de comunicación que esperaban a las puertas del templo.
«Ha sido ahora por la calor y por todo, después de enseñar las tetas. Tenía los pies hinchados y se encontraba cansada. También estaba nerviosa», ha dicho el religioso al tiempo que ha confirmado que Luis Rubiales ha hablado previamente con su progenitora y le ha convencido de que saliera de la iglesia y dejase de hacer toples. En la puerta del templo del barrio de Capuchinos se agolparon durante todo el día grupos de curiosos y personas que apoyan a Rubiales y a su familia, algunos de los cuales se han cruzado reproches con algún vecino que les ha criticado, apoyando la postura de Hermoso.
Ya se sabe que Luis Rubiales dimitirá finalmente como presidente de la RFEF tras la promesa de un futuro mejor que Pedro Sánchez en persona le ha hecho. Su nuevo destino será el Deportivo de La Coruña, club que compró por la friolera de 5 euros. Rubiales decidió su camino en medio de su orgía diaria, adornada en esta ocasión con enanos vietnamitas desnudos portadores de cuencos de cocaína sobre la cabeza. Ha trascendido que sustituirá a toda la plantilla masculina por jugadoras brasileñas, que los expertos ya aseguran que mejorarán sin duda el rendimiento de la actual plantilla. El Dépor será un exilio dorado para tan gran personaje, al que devolverá sin duda a su pasado esplendor.
El aún presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, que esta semana anunció que no dimite, aseguró que Jenni Hermoso quiso realizarle una felación durante el polémico beso que, según él, fue «libre, mutuo y consentido». El dirigente está en la piqueta mediática tras sus gestos obscenos en el palco de autoridades y su beso sin consentimiento a la jugadora en la final del mundial de fútbol femenino, que ganó España. «Se me está tratando de matar. No hay deseo ni posición de dominio, aunque se esté vendiendo otra cosa en muchos medios, que están rindiendo pleitesía ante el falso feminismo, que es una plaga en este país. Ella incluso quiso chuparme la polla y yo no le di opción porque soy víctima de una cacería”, aseveró el máximo dirigente del fútbol español.
Rubiales, que estos días dejó embarazada a una chica con la que tropezó, comunicó su decisión de no dimitir ante la asamblea de la federación, que le ha recompensado con una ovación. Lo hace pese a que el Gobierno le ha advertido de que si no tomaba medidas motu proprio las tomaría el Consejo Superior de Deportes. Pese a el duro comunicado del sindicato que representa a Jennifer Hermoso pidiendo sanciones contra Rubiales y la presión constante del Gobierno. Pese a la sanción de la FIFA y pese a que había perdido el apoyo de los clubes de fútbol.
En este momento, el presidente de la Federación tiene al menos cuatro denuncias ante el Tribunal de Arbitraje del Deporte: una del afiliado de la RFEF Miguel Ángel Galán, otra del exárbitro profesional Xavier Estrada Fernández, una de Sumar y otra de la Liga F. Le acusan de incumplir el protocolo contra la violencia sexual de la Federación, la ley del Deporte y, quizás, de un abuso de poder por ser el jefe de Hermoso en el contexto de la federación.
«¿De qué color llevas la ropa interior?«
Luis Rubiales ha protagonizado numerosas polémicas en los últimos años e incluso fue denunciado por acoso por Tamara Ramos, cofundadora del sindicato Futbolistas ON y ex directora de marketing de la AFE (Asociación de Futbolistas Españoles), donde trabajó con el exfutbolista canario de 46 años hace varios años, de 2012 a 2017, cuando este era el presidente de la AFE. Tras lo sucedido con Jennifer Hermoso, Tamara ha relatado el infierno y las humillaciones que sufrió por parte de Rubiales, situación que le obligó a dejar el su puesto y quedarse sin trabajo, según su versión, a pesar de que tenía dos hijos, un bebé de tres meses en aquel entonces. Luis Rubiales le hacía preguntas íntimas y personales, según indicó Tamara. «Me hacía preguntas del tipo: ‘¿de qué color traes hoy la ropa interior?’
En la última Supercopa femenina, ganada por el Barça, Rubiales quedó en evidencia al no entregar las medallas a las campeonas y, en vez de esto, dejarlas en una mesa donde las futbolistas las fueron a recoger por su propio pie. Además, Rubiales también ha sido uno de los focos de las críticas de Las 15, el grupo de jugadoras que pidieron no ser convocadas con la selección española hasta que no hubiera cambios reales en el equipo, se cesara al técnico, Jorge Vilda, y se lograra una profesionalización efectiva del fútbol femenino.
Uno de los momentos más difíciles para el presidente de la RFEF fue cuando salieron a la luz unos audios con Gerard Piqué, jugador del Fútbol Club Barcelona, en 2019, donde se hablaba del traslado de la Supercopa de España a Arabia Saudí. El contrato, fechado el 11 de septiembre de 2019, tiene una vigencia de seis años y “garantizaba a la Federación unos ingresos de 40 millones de euros libres de impuestos por temporada, una cifra que disparó el salario variable que percibe Rubiales por presidir ese organismo”. Además, la empresa del jugador del Fútbol Club Barcelona se embolsó una comisión de 24 millones de euros.
«Un saco de cocaína»
Rubiales fue acusado de desviar dinero de la RFEF pero no dimitió. En vez de esto protagonizó una rueda de prensa surrealista donde llegó a afirmar que esperaba «no aparecer con un tiro en una cuneta». «No fumo, no bebo, pero yo no puedo garantizar que el día de mañana no me vayan a meter un saco de cocaína en el maletero», añadió.
Orgías en las «jornadas de trabajo»
El presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) fue denunciado ante la Fiscalía Anticorrupción por su propio tío y exjefe de Gabinete, Juan Rubiales, por un presunto desvío de dinero federativo para pagar varias orgías con amigos en la localidad granadina de Salobreña. El mandatario habría celebrado este ‘evento’ en un chalé justificando unas «jornadas de trabajo» que finalmente «no fueron tal». En su denuncia ante la Justicia, Juan Rubiales asegura que su sobrino no realizó ningún tipo de encuentro relacionado con su actividad profesional, sino que celebró estas orgías con entre ocho y diez mujeres jóvenes «únicamente para disfrute de él y de su equipo más directo», entre los que estaría su amigo, el exfutbolista Nené, «pagándose los gastos con tarjetas empresa de la propia RFEF».
