La Federación de retrasados de España (Feres) demandará al presidente de la Confederación Empresarial de Hostelería de España, José Luis Yzuel, «por competencia desleal» y «por eclipsar a todos los retrasados españoles». Yzuel afirmó recientemente que «de toda la vida trabajar media jornada es de 12 a 12, eso se llama flexibilidad» y pidió «poner grilletes a los camareros para que ya directamente no puedan salir de los bares y restaurantes de España». Feres considera que «con sus declaraciones, José Luis Yzuel, se convierte en tan retrasado que deja sin estupidez a las demás personas al absorberla toda». En opinión de los atrasados de España, «no se puede consentir que este señor nos deje sin retrasados en este país porque a su lado cualquier persona parece inteligente».
Yzuel, por su parte, intentó rectificar diciendo que se trataba de «un chascarrillo». Tarde, porque cientos de entidades sociales y políticas, así como ciudadanos de a pie indignados, exigieron su dimisión inmediata. «Que un camarero diga que trabaja 10 horas, no sé si es grave, ¿no?», aseveró. «Trabajar a turno partido, el sábado, el domingo, los festivos. ¡Las horas, que hacen 10 horas! ¡Joder, qué dolor!», añadió el que ya es considerado «el cuñado de España».
El presidente de los hosteleros llegó a afirmar que no es malo trabajar diez horas «porque en temporada alta hay que aprovechar». En contraposición, aseguró que «trabajar más de ocho horas no significa que no se les pague o que no se les compense». En este sentido, indicó que «hay mucha gente dispuesta a cobrar un sobresueldo de maravilla para luego tener dos meses de vacaciones en vez de uno», confesó, en lo que podría ser una clara alusión a estratagemas ilegales como el cobro en dinero negro.
El 71% de las pequeñas y medianas empresas en España tienen dificultades a la hora de cubrir sus vacantes de empleo. Así lo ha trasladado Cepyme -la patronal de las pequeñas y medianas empresas- según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). Es una situación que se ha vuelto habitual en nuestro país. Las empresas buscan trabajadores, pero no los encuentran. Y si hay un perfil donde cada vez es más difícil encontrar ése es el de los camareros.
Los empresarios acusan a los jóvenes de no querer trabajar, lo que choca frontalmente con la realidad. No es ningún secreto que tradicionalmente en la hostelería había campo libre para toda clase de irregularidades laborales y desmanes varios. Los camareros reiteran que las condiciones laborales en el sector se han vuelto aún más precarias. O directamente inhumanas. Y denuncian que muchas empresas publican ofertas abusivas. Por eso los jóvenes buscan otras alternativas de trabajo más dignas.
