El ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, tampoco pudo acceder ayer a la sala Pelícano porque no llevaba corbata. El personal de la discoteca coruñesa comunicó al político que tendría que permanecer en el exterior del recinto debido a esa norma. De nuevo, el protocolo ha impedido al representante gubernamental participar en un evento, después de que el equipo de protocolo de la Comunidad de Madrid impidiese su acceso a la tribuna principal por el desfile del Dos de Mayo, día de la región madrileña. El incidente, ocurrido a pie de escalera y con dos empleadas de la Administración regional cortándole el paso a un ministro del Gobierno de Pedro Sánchez, cerró una jornada marcada por la tensión entre el Ejecutivo central y el autonómico.
La portavoz del Ejecutivo, Isabel Rodríguez, consideró la acción propia de “partidos antisistema” y la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, defendió el veto al ministro de la Presidencia: “Vino a provocar, lo que no puede pretender el Gobierno es avasallarlo todo”. Por su parte, el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, valoró los vetos de Madrid y Coruña como «una canallada» y explicó que se encuentra actualmente de baja por depresión tras sufrir estos hechos, que calificó de «lamentables».