Tras haberse convertido en un fenómeno viral, el muñeco del alcalde de Coruña, Xulio Ferreiro, sustituirá en el cargo al propio Xulio Ferreiro. El ávatar alcanzó fama mundial después de que el regidor decidiese no participar en un debate al que sí acudieron los cabezas de lista de los principales partidos. El evento fue organizado por la Asociación de Emprendedores de Galicia (Ascega), que reemplazó a Xulio Ferreiro por un muñeco con su careta y su característica camisa hipster a cuadros. El alcalde extremista envió en su lugar al concejal de Empleo y Economía Social, Alberto Lema, pero Ascega vetó su intervención. «El maniquí lo hizo mucho mejor de lo que lo haría el propio Xulio Ferreiro, estamos encantados con la gran repercusión obtenida», señalaron desde Marea Atlántica, que afirmaron que «el muñeco será el nuevo candidato a partir de mañana mismo».
Xulio Ferreiro, que hoy se convirtió en trending topic mundial, valoró su cese en el cargo como «unha oportunidade de facer novas cousas por Coruña desde outros eidos» y «sen ser un xoguete roto». Además deseó «toda a sorte do mundo» a su avatar e incluso destacó la «fermosura» de su camisa en su cuenta oficial de Twitter. «La verborrea del muñeco es muy superior a la del Xulio Ferreiro humano y eso por no hablar de su carisma», añadieron desde Marea Atlántica. La formación extremista aspira a hacerse con la alcaldía de Coruña. Sus proyectos estrella son hacer una autopista carril-bici entre Santiago y Coruña, organizar una asamblea mundial de barbudos y ofrecer descuentos en el supermercado a las personas no heterosexuales.
Xulio Ferreiro, que recientemente se convirtió en modelo de calzoncillos de lujo «para normalizar a multiplicidade de opcións sexuais existentes», pidió al Gobierno apoyo para reformar Riazor y fue excomulgado el por ridiculizar al papa en los carteles de Carnaval. El pequeño sátrapa coruñés, impulsor de una campaña para que el electrolatino invada Coruña, aseguró que los Illuminati se encontraban tras esa campaña de desprestigio hacia su persona.
Desde que gobierna en María Pita, la Marea mantiene una lucha encarnizada por arruinar las Navidades a los católicos. A su cartel con tres lesbianas travestidas de reyes magos haciendo un gesto obsceno del año pasado hay que sumar la contratación del Grinch y el Krampus «para chafar» esos festejos. En esta línea, los podemitas han substituído la tradicional cabalgata de Reyes por la del Apalpador, lo que causó que la marea blanca facha coruñesa reclamase la cabeza del alcalde bolchevique. Además, el regidor comunista pidió suprimir directamente la Navidad y los villancicos.