Tras la polémica suscitada con un cartel del Carnaval de A Coruña 2017 «alusivo al Papa» que el Arzobispado de Santiago pidió retirar al considerarlo «una burla» para los creyentes, el Vaticano aseguró hoy que el alcalde de esa ciudad, Xulio Ferreiro, «ha sido excomulgado». La ilustración en cuestión, obra del dibujante Guitián, muestra a una persona en evidente estado de embriaguez disfrazada del Santo Padre, subida al Papamóvil y alzando su cáliz hacia los cielos. El portavoz en Galicia del Vaticano, Pelayo Ridruejo de Mesa, explicó que «la pena de excomunión se ha aplicado ipso facto ya que el alcalde de La Coruña ha incurrido en flagrante herejía» por lo que «ha sido repudiado de inmediato del seno de la Iglesia al insultar a uno de sus dogmas». En esta línea, De Mesa incidió en que «el papa Francisco es el representante de Cristo en la Tierra» por lo que «no se deben consentir este tipo de actos terroristas» contra su imagen. «Este mareante, este hipster comunista que ha hecho de las camisas a cuadros y las cabezas perfectamente despeinadas su herejía, no puede insultar impunemente a tanta gente e irse de rositas, Julio Ferrero debe responder por sus crímenes de lesa humanidad», añadió Pelayo Ridruejo.
La Iglesia Diocesana de Santiago fue la primera institución que mostró su disconformidad con este cartel, ya que en su opinión «hiere los sentimientos de los creyentes», se burla de «las creencias de miles de coruñeses y ofende, gratuitamente, a cuantos, católicos o no católicos, sienten un respeto profundo y sincero por la persona del Papa». Tras esta protesta inicial surgió una campaña de recogida de firmas en Internet, que pide la retirada del cartel en cuestión. Los impulsores de esta iniciativa, que desde el lunes ha reunido 2.600 firmas, exigen una disculpa «pública» por parte del concejal de Cultura, José Manuel Sande. «Se aprovechan de los cristianos, que en vez de volar a los autores (como en el Charlie Hebdo), ofrecemos la otra mejilla», sostienen los promotores de la recogida, para demandar «la promesa» de que los impuestos de los coruñeses «no van a servir para financiar campañas publicitarias ofensivas y tan malas».
Este diseño es uno de los cuatro carteles presentados por el Ayuntamiento con motivo del Carnaval 2017, todos obra de Guitián. Otro representa a dos choqueiros con caretas de animales, una tercera a María Antonieta con la cabeza separada del cuerpo y sujeta por una mano. Y la cuarta a Enrique VIII de Inglaterra con medias de rejilla y zapatos de tacón copulando con un caballo.
«Incitación a la zoofilia» y «lamentable frivolización del travestismo»
En este sentido, el Ayuntamiento coruñés también recibió las críticas de la Sociedade galega de amigos dos animais, que consideró este último cartel «unha clara incitación á zoofilia». Por su parte, el colectivo LGTB coruñés consideró «lamentable» el hecho de que «el evidente travestismo de Enrique VIII se ridiculice de forma tan pobre». Por su parte, la Asociación de mulleres maltratadas valoró como «de muy mal gusto» el cartel de María Antonieta decapitada y consideró «deplorable» la «frivolización del drama de la mujer maltratada». Además, el colectivo Amigos dos monos e dos porcos censuró «el mal gusto extremo» a la hora de «hacer chanza de dos animales nobles y lozanos como son los monos y los cerdos» en el cartel que los representa.
No se trata de la primera vez que los bolcheviques coruñeses intentan sabotear los valores católicos, ya que es sabida su obsesión por intentar atentar contra la Navidad, lo que les ha llevado a realizar todo tipo de iniciativas mezquinas como la supresión de la tradicional cabalgata de Reyes y su reemplazo por la figura de un viejo verde que toquetea a los niños.