Las pruebas de ADN no mienten, el marido de Nuria Roca, que nadie sabe cómo se llama aunque chupa tanta cámara, son muchos hombres diferentes, recogidos de la calle minutos antes de salir al directo a los que se pega una barba guarra postiza. Este estudio ha sido encargado y filtrado por Mediaset para hacer mella en la audiencia de su competidora de La Sexta.
Hacía tiempo que se sospechaba que el personaje en cuestión era ficticio, sobretodo debido a que cada vez que interviene en el programa de la Roca no dice más que subnormalidades y no hace ni puta gracia a nadie. Pero, eso sí, llena muchos minutos del programa de telebasura con sus caras de imbécil y sus salidas de tono.
Ahora toda la trama ha sido probada. Mediaset guarda imágenes de cómo el equipo de producción de La Roca recoge a indigentes de la calle, y por cinco euros mas dos rayas de cocaína participan en el programa. Tienen que ser hombres muy feos con aspecto de alcohólicos, con las aletas de la nariz innegablemente hinchadas por la coca y muy desaliñados para que todos den el papel, cuyo origen fue que una vez Nuria Roca tenía a dos viejos, ella es gerontófila reconocida, comiéndole la vulva bajo la mesa y uno sacó la cabeza un momento por encima. Entonces se le ocurrió que era su marido y que se llamaba no se sabe cómo, porque nadie se acuerda de cómo se llama por mucho que sale en pantalla. «No es endogamia como al final se ha demostrado, yo no hago esas cosas…», ha afirmado la Roca al respecto tras ser descubierta.
