El candidato del PSOE en la Comunidad de Madrid, Ángel Gabilondo, es en realidad un viajero en el tiempo nacido en 1843. Se aclara así el mayor enigma de las elecciones madrileñas: ¿Cómo es posible que exista un hombre tan antiguo en pleno siglo XXI? Que Gabilondo parece un hombre de otra época es evidente, tanto por su aspecto como por su forma de hablar. Pero lo que nadie podía imaginar es que esto ocurre porque efectivamente se trata de una persona del pasado.
Y es que Ángel Gabilondo Pujol se llama en realidad Mariano Gaspar y Rimbau. Nos hizo creer hábilmente a todos que es hermano del periodista Iñaki Gabilondo mientras se forjaba una identidad y una vida ficticias. Su verdadero hermano, Enrique Gaspar, publicó en 1887 El anacronópete, la primera obra mundial en la que la ciencia permitía viajar al pasado. Ocho años después H.G. Wells se llevó la gloria gracias a su popular novela. El británico se ganó de forma inmerecida la fama, sí, pero los hermanos Gaspar, amigos inseparables, hicieron realidad el sueño de viajar en el tiempo.
De este modo, a través de técnicas en las que aún hoy varios expertos siguen indagando, Mariano Gaspar viajó desde el año 1867 a España, cuando tenía 24 años. Se infiltró en la familia de Iñaki Gabilondo y se hizo pasar por un hermano suyo. «Era totalmente imposible que pudiese existir alguien tan antiguo, tan de otro siglo, tenía que haber gato encerrado», sostiene Ildegarda Gámez, la investigadora y doctora en Metafísica que acaba de desvelar este misterio. «Ver al supuesto Ángel Gabilondo en el debate del otro día con los candidatos, en el que parecía un pulpo en un ascensor, me hizo ver de forma clara que se trataba de un personaje antiguo… ¡Nadie en el siglo XXI puede llevar esas gafas y ese peinado y hablar de esa forma!», añade la experta en viajes temporales.
Por el momento se desconoce el paradero de la máquina del tiempo, aunque otros investigadores sostienen que podría estar en manos de Vox. «Solo de esta forma se podría explicar el surgimiento de estas ideas decimonónicas y retrógradas en nuestra época, así como de personajes que huelen tan a naftalina como Abascal y tantos otros», explica Ildegarda. «El pestazo a viejo es tan intenso en las elecciones de Madrid que ese fue el detonante de la investigación», añade.
En cuanto a las encuestas, los últimos sondeos publicados daban una victoria a Isabel Díaz Ayuso, aunque no podría gobernar sin el apoyo de Vox. En cambio, el bloque de la izquierda, conformado por PSOE, Más Madrid y Unidas Podemos no lograría la mayoría absoluta. A pesar del repunte en las encuestas de Más Madrid tras la promesa de Íñigo Errejón de meterse un palo por el culo si su formación ganaba. Es más, Mónica García, candidata de Más Madrid, podría lograr por primera vez en la historia el sorpasso a la formación socialista.
