La Audiencia Provincial de Madrid ha absuelto a la expresidenta de la Comunidad de Madrid Cristina Cifuentes por el caso Máster. Condena a la anteriormente asesora, María Teresa Feito, a tres años de cárcel como inductora de la falsificación. También condena a su peluquera, Micaela Gutiérres, y su lechero, Joaquín Hedrera, a dos años y seis meses de prisión respectivamente «por inducción surrealista al delito».
Cifuentes fue absuelta así delito de falsedad documental del que había sido acusada por la Fiscalía de Madrid por inducir la falsificación del acta del Trabajo de Fin de Máster del curso que siguió en la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid en 2012. La absuelve «en virtud de lo establecido por la primera parte de la parte contratante» por no haberse podido demostrar que indujo a la falsificación, a pesar de que era ella la máxima beneficiaria del acto.
La Audiencia también condena a un año y seis meses de cárcel a la profesora Cecilia Rosado, que se había autoinculpado de la falsificación del trabajo. La fiscal Pilar Santos solicitó en el juicio una condena tres años y tres meses de cárcel para la exlíder madrileña al quedar acreditado que indujo la falsedad del documento objeto del juicio, dado que Cifuentes era «la única, la primera y la última beneficiaria» de esa falsificación.
Cifuentes afirmó durante su declaración que cursó el máster sin ir a clase, sin realizar exámenes y entregando el 2 de julio de 2012 el TFM «sin defenderlo» ante el tribunal, algo que también hicieron otros alumnos. «Actué de buena fe», afirmó en relación al acta que mostró a los medios el día que estalló la polémica, el 21 de marzo de 2018, al desconocer que contaba con firmas falsificadas, un hecho del que responsabilizó a la propia universidad. Cifuentes dimitió el 25 de abril de 2018 después de que a esta polémica se sumara la difusión de un vídeo en el que aparecía supuestamente robando unas cremas.
Presunto regalo del título a Pablo Casado
Con esta resolución, de 19 páginas y que puede ser recurrida, los magistrados cierran otro de los capítulos de un proceso judicial que se centró en un primer momento en la existencia de una trama urdida por el catedrático Enrique Álvarez Conde para regalar títulos a políticos: entre otros, al actual líder de la oposición, Pablo Casado. La investigación se envió, incluso, al Tribunal Supremo, pero este rechazó abrir una causa contra el ahora presidente del PP.