Los fines de semana trabajo poniendo copas. Detrás de la barra soy (o debo ser, según me dice el bendito de mi jefe) como el torero en la plaza: yo te mareo, yo te analizo, yo adivino lo que quieres, te enfilo y la estocada llega con la cuenta. Te has desangrado creyendo que me había enamorado de ti. Y esto, que es de lo más simple, me da a mí horas y horas de diversión y análisis de los tipos humanos que me gustaría compartir desde la sinceridad más descarnada con los hipotéticos lectores de Panoplia. Aprovechen, en pocos lugares les dirán estas verdades.
Llevo a gala haber trascendido personalmente el paradigma hombre/mujer, si bien lo sufro a diario y desde hace poco lo utilizo en mi provecho. Tengo amigos que me hablan en confianza. Señoritas, esto va para ustedes. Un par de realidades sobre el ligoteo fácil que más vale empiecen a asimilar. Centrémonos hoy en el universo online: redes sociales varias y was was.
-Cuando hablan contigo, existe un 60% de posibilidades de que estén rodeados de un corro de tipos atentos a la jugada, analizando y comentando. Sí, los tíos son más cotillas que nosotras.
-Cuando hablan contigo, hablan a la vez con 15 o 20. Enseñarán tu foto a modo de trofeo metafísico. No es que no te valore, es una cuestión estadística. Si no cae una, caerá otra.
-Cuando te dicen “guapa” (o expresión equivalente) y seguidamente “huy perdón, no era para ti”. Significa: tengo una esperanza lejana de echarte un polvo y cualquier vía es buena por cutre y precaria que sea. Incluso ésta.
-Cuando te dicen “eres una tía que impone” significa “eres una borde espectacular pero aún así te daba lo tuyo”. También “me das miedo” o “contigo tendré que emplear técnicas más sutiles”.
-Cuando dicen “está loca”: aparte de la posibilidad de que la tía esté efectivamente loca, aquí meten de todo. Llaman loca a la que no entienden, a la que los rechazó, a la que muestra niveles de apasionamiento excesivos a juicio del galán en cuestión, incompatibles con su comodidad y desahogo. Loca es el calificativo más gastado y gratuito aplicado a las mujeres como especie, después de puta. Y digo como especie porque el 55% de los hombres no ven a las mujeres como seres humanos, las ven como mujeres a secas, como grupo vaporoso e internamente homogéneo, como amenazantes presencias seductoras/traicioneras o directamente como extraterrestres.
Y la realidad es, simple, desencantada, la realidad es que hombres y mujeres somos iguales.
Querida Bradamante, es una lástima que en los sitios en los que intento pillar cacho no me encuentre con mujeres como usted. De todas formas, no entiendo por qué le pasa todo eso en las redes sociales. Quiero decir que ¿por qué no es sincera entonces?
Totalmente de acuerdo!
Si somos tan iguales… ¿Por qué no copulamos salvajemente con una de vosotras cada día sin problemas?. Algo no me encaja