Hermosa alegoría que, mediante el empleo de dos personajes pertenecientes al videojuego más famoso de todos los tiempos, el Comecocos, lanza un mensaje aparentemente inocuo y pueril bajo el que subyace una realidad monstruosa. El comedor persigue al fantasma tras un substrato granítico que encierra la dureza de una sociedad injusta, terrible, angustiosa y desigual donde unos se dedican a engullir a los demás sin comtemplaciones. No hay mensaje escrito como tal, aunque se intuye algo mucho peor: una ideología que bebe de las teorías de la conspiración, la creencia en que los gobiernos de todas las naciones toman decisiones a espaldas de los ciudadanos, ocutando información para el beneficio de una reducida élite que monopoliza el poder y la riqueza. Una flecha señala al devorador y a su denominación: «System», el sistema. Otra hace lo propio con el fantasma y su definición: «You», es decir, tú y yo, todos los que no pertenecemos a esa oligarquía. El valor artístico de esta obra es escaso, pero su mensaje profundo es lo que la hace muy valiosa. Puntúo esta pintada con un ocho sobre diez. Hasta la próxima entrega y recuerden que pueden enviarme fotografías de las pintadas que encuentren en sus calles a info@panoplianews.com. Un abrazo a todo el mundo y gracias por leerme.
Adelaida Martínez